Juan Carlos Díaz Lorenzo

Hace algo más de un año que los miembros del club Aurinkolaivue [Escuadrilla del Sol], formado por ex pilotos finlandeses residentes en la Costa del Sol, vieron finalizados los trabajos de restauración y pintado exterior de un avión Convair CV 440 Metropolitan perteneciente al Museo Aeronáutico de Málaga. A ellos corresponde la iniciativa financiada con ayudas y donativos, mientras que el personal especializado del Museo asumió la delicada tarea de ponerlo en condiciones. 

El empeño estaba plenamente justificado y la presentación oficial se hizo coincidir con el 50º aniversario de dicho vuelo, pues el primer avión que aterrizó en la recién estrenada pista asfaltada, el 20 de octubre de 1959, fue un Convair CV 440 de la compañía finlandesa Kar-Air, matrícula OH-VKN, en el que viajaron 48 pasajeros, dando comienzo así al carácter internacional del aeropuerto de Málaga y al flujo turístico aéreo con destino a la Costa del Sol[1].

El vuelo había cubierto la ruta Helsinki-Málaga con escalas en Gotemburgo, Basilea y Barcelona, dando inicio así a la denominada “Ruta del Sol”, en un recorrido de unos tres mil kilómetros[2]. El avión realizó el vuelo al mando del capitán Olli Mäkinen y el copiloto Antti Waris y junto a los pasajeros del vuelo fueron recibidos a pie de escalerilla por las autoridades locales y el director del aeropuerto.

El avión ha sido restaurado siguiendo un preciso plan de trabajo

En el transcurso del último año prosiguieron los trabajos de restauración en la cabina de la aeronave para su transformación en un curioso museo de turismo de hace medio siglo. Ello nos permite conocer los asientos, los equipajes de la época y las instrucciones que se daban a los pasajeros. La cabina de mando tiene su instrumental completo y el manual de mantenimiento fue obsequiado por Raimo Makkonen, director del Museo de Aviación de Finlandia.

El 20 de octubre de 2010, el embajador de la República de Finlandia en España, Markku Keinänen, participó en el acto organizado al efecto, al que asistieron representantes de la familia Karhumäki, propietarios de Kar Air y unos 150 invitados, así como directivos del Museo y del aeropuerto de Málaga. Los principales impulsores del proyecto de restauración del citado avión son Matti Lampela y Pertti Sleeve, quien hizo entrega al embajador de un estandarte del club Aurinkolaivue.

Matti Lampela, ex piloto de líneas aéreas, descubrió el viejo avión en el Museo del aeropuerto de Málaga –obra en la que puso mucho empeño el ingeniero e historiador aeronáutico Luis Utrilla Navarro- y desde entonces surgió la idea de restaurar el avión, que ahora es una realidad.

El bimotor de fabricación norteamericana, visto de morro

De este modelo, la compañía Kar-Air operó dos aviones

La efeméride se celebró como es debido. Pilotos, azafatas y pasajeros vistieron a la usanza de la época y recrearon la llegada bajando por la escalerilla del avión en la antigua terminal del aeropuerto. A pie de escala les esperaban dos personajes históricos del turismo en la Costa del Sol, Rafael de la Fuente y Antonio García del Valle, los cuales, en 1959 eran unos jóvenes agentes de Viajes Málaga. Recibían a los turistas y la mayoría se alojaban en Torremolinos, haciendo el viaje desde el aeropuerto hasta el hotel en tres grandes coches americanos. De modo, pues, que las primeras “suecas” que llegaron a la Costa del Sol, eran, en realidad, finlandesas, como bien dice Alfonso Vázquez, en su crónica publicada en el periódico La Opinión de Málaga[3].

Kar Air tiene su origen en los hermanos Niilo y Valto Karhumäki, pioneros de la aviación en Finlandia. Nacidos en Multia, pasaron su juventud en Keljo, cerca de Jyväskila, donde a finales de 1924 iniciaron la fabricación de cuatro aeroplanos denominados Karhu 1, Karhu 2, Karhu 3 y Tiira.

Su interés por la aviación les llevó a extender sus negocios a otros niveles –formación de pilotos, mantenimiento de aeronaves, trabajos aéreos…- durante la década de los años treinta, razón por la cual fundaron una compañía denominada Veljekset Karhumäki Oy, con la que prestaron asistencia a las Fuerzas Aéreas de Finlandia. Dicha circunstancia determinó la construcción de una fábrica de aviones en Kuorevesi, que alcanzó un notable protagonismo durante la II Guerra Mundial.

Primer logotipo de Karhumäki Airways

CV 440 Metropolitan para Kar-Air en la cadena de montaje final

Karhumäki Airways nació como compañía de aviación en 1950, haciendo vuelos domésticos y a partir de 1951 comenzó con los vuelos chárter. En 1957 la compañía pasó a denominarse Kar-Air. Sus primeros aviones fueron cuatro Douglas DC-3[4] y dos Convair CV-440 Metropolitan[5], que volaron en líneas nacionales,  Estocolmo y chárter al sur de Europa. En 1961, la filial sueca Ab Kar-Air compró un avión Douglas DC-6B[6], también utilizado con la misma finalidad.

En el transcurso de 1963, los dos aviones Convair CV 440 Metropolitan sufrieron daños de importancia en sendos aterrizajes bruscos, y aunque fueron reparados, tales incidencias pusieron en serios aprietos financieros a la compañía. El servicio doméstico que atendía Kar-Air fue atendido por Aero O/Y y, al mismo tiempo, las negociaciones de los hermanos Karhumäki con Finnair estuvieron condicionadas a que renunciaran al tráfico nacional para dedicarse exclusivamente al chárter.

DC-3 de Kar-Air expuesto en el Museo de la Aviación de Finlandia

Por esa razón, Kar-Air operó entre 1964 y 1972 dos aviones DC-6B[7] procedentes de Finnair y otro en propiedad[8], con el que, incluso, llegó a realizar algunos viajes de vuelta al mundo. En 1972, Kar-Air ingresó en la era de la aviación a reacción y compró un avión Douglas DC-8-51[9], que también realizó vuelos por cuenta de Finnair hasta 1980, cuando venció el acuerdo entre ambas compañías.

El citado avión causó baja en 1985 debido a las nuevas normativas de ruido y el elevado consumo de combustible. Esta situación obligó entonces a Kar-Air a alquilar a Finnair un avión Douglas DC-8-62[10], que sería utilizado en vuelos chárter hasta 1987.

Lodestar 18 de Kar-Air conservado en el Museo de Aviación de Finlandia

En la década de los setenta, Kar-Air operó otros aviones de hélice, como un Lockheed 18 Lodestar[11], dedicado a prospecciones mineras y un Douglas DC-3[12] y entre 1979 y 1997 tuvo un avión De Havilland DHC-6 Twin Otter[13]. Entre 1972 y 1973 atendió una línea de carga entre Oulu y Kuusamo con un avión DHC-6[14] adaptado y comprado en EE.UU. Sin embargo, este aparato resultó destruido en febrero de 1973, después de un aterrizaje forzoso en las proximidades de Pudasjärvi, sin que hubiera víctimas. La línea carguera continuó atendida por un Douglas DC-3[15] y posteriormente pasaría al control de Finnair.

En 1980 se produjeron algunos cambios en la estructura de la empresa y a partir de entonces, el nombre comercial sería conocido como Karair. En 1986, Finnair compró dos aviones Airbus A300 B4[16] que le serían arrendados y utilizados en vuelos chárter al sur de Europa hasta 1992, en que retornaron al control de su propietaria.

Posteriormente, Karair volvió a operar en las rutas domésticas de Finlandia con seis aviones ATR-72[17] y a partir de 1992 Finnair incrementó sus porcentajes accionariales en el capital de Karair, dando como resultado, en septiembre de 1996, la absorción de de ésta por la primera. Fue la mejor solución, sino la única posible, en medio de la fuerte recesión económica que afectó al país.

Todos los aviones que entonces tenía Karair fueron repintados con la imagen corporativa de Finnair y el avión DHC-6 Twin Otter fue vendido a Malmilento Oy, para dedicarlo al reconocimiento de minerales.  Sin embargo, en 2002, una sentencia de los tribunales de Justicia declaró ilegal la acción de Finnair, lo que obligó a compensaciones económicas a los propietarios de la extinta Karair.

Fotos: Manuel Fernández (Málaga, www.airplanes-pictures.net), Tom Edvardsson (colección, www.airliners.net), Ilkka Portti (Helsinki, www.airliners.net) e Yrjö Mäkelä (Helsinki, www.airliners.net)


[1] Hasta entonces, con la pista de aterrizaje en terreno compactado, la compañía inglesa BKS Air Transport había efectuado vuelos al aeropuerto de Málaga en un bimotor, que transportó 850 pasajeros en un año.

[2] Kar-Air volaba desde 1956 a Palma de Mallorca y había efectuado algunos vuelos a Gibraltar, a la espera de que el aeródromo malagueño dispusiera de la pista de vuelo adecuada para la operativa de sus aviones Convair CV 440 Metropolitan. 

[3] “El primer vuelo chárter de la Costa revive medio siglo después”. La Opinión de Málaga, 21 de octubre de 2009.

[4] Matrículas OH-AVK, OH-VKB, OH-VKC y OH-VKD. El primero de ellos está preservado en el aeropuerto de Munich, aunque pintado con los colores de la compañía Swissair, con la que nunca llegó a volar.

[5] Matrículas OH-VKM y OH-VKN.

[6] Matrícula SE-BDX.

[7] Matrículas OH-KDA y OH-KDB. En 1968, el primero de ellos fue modificado con cola abatible para su utilización como carguero y fue utilizado por Finnair Cargo, con tal cometido, hasta 1980.

[8] Matrícula OH-KDC, ex SE-BDX.

[9] Matrícula OH-KDM.

[10] Matrícula OH-LFZ.

[11] Matrícula OH-VKU Kultakuokka. Ex F-ARTF, ex N9965F, ex N9955F. Conservado en el Museo de la Aviación de Finlandia, situado en el aeropuerto de Vantaa.

[12] Matrícula OH-VKB. Se trata de uno de los DC-3 más antiguos que existen y también está conservado en el Museo de la Aviación de Finlandia.

[13] Matrícula OH-KOG.

[14] Matrícula OH-KOA.

[15] Matrícula OH-VKB.

[16] Matrículas OH-LAA y OH-LAB

[17] Matrículas OH-KRA, OH-KRB, OH-KRC, OH-KRD, OH-KRE y OH-KRF.

La estancia del embajador de la República de Finlandia en Tenerife finalizó en la tarde del miércoles 27 de octubre con una agradable tertulia en el domicilio particular del profesor Alberto Darias Príncipe, catedrático de la Universidad de La Laguna y gran amigo de Finlandia, país del que sabe mucho de su historia, de sus personajes, de su arte y, especialmente, de su arquitectura.

El profesor Darias y el embajador Keinänen compartieron impresiones sobre el modelo universitario español y finlandés, la tradición histórica de Finlandia, el protagonismo de arquitectos como Engel, Lohrmann, Eliel Saarinen, Johan S. Siren, Alvar Aalto, Eero Saarinen y otros más actuales como Helander, Leiviskä o los hermanos Siren; el ejercicio de la diplomacia finlandesa y la era del presidente Kekkonen, el gran despegue tecnológico de Finlandia y la presencia y proyección actual de Finlandia en Europa y en el mundo. Fue un buen epílogo a una visita intensa y fructífera.

El profesor Darias, que fue uno de los primeros inquilinos de la “Casa Finlandia” en Santa Cruz de Tenerife hace más de treinta años, fue el conferenciante encargado de inaugurar la I Semana de Finlandia en Tenerife, que se celebró en la capital tinerfeña en diciembre de 2007, coincidiendo con el 90º aniversario de la independencia de Finlandia. En la actualidad ejerce como docente en el Departamento de Historia del Arte de la Universidad de La Laguna.

En la reunión en el domicilio particular del profesor Darias estuvieron presentes, además, las hijas del relevante docente universitario, Thais y Lara, Juan Manuel Ropón y el cónsul de Finlandia en Santa Cruz de Tenerife, Juan Carlos Díaz Lorenzo. El embajador y el profesor se intercambiaron obsequios: vidrio de diseño de Alvar Aalto y el libro El Parlamento de Canarias, obra recién publicada. 

Alberto Darias, el embajador Keinänen, el cónsul Díaz Lorenzo, Thais y Lara Darias Purriños y Juan Manuel Ropón

Alberto Darias y el embajador Keinänen, en su distendida conversación

El embajador Keinänen lee la dedicatoria que Alberto Darias escribió en su último libro: «El Parlamento de Canarias»

Alberto Darias Príncipe nació en la villa de San Sebastián de La Gomera en 1945, en el seno de una familia vinculada con la actividad portuaria, pues su padre, Alberto Darias Veguero, era consignatario de los barcos del cabotaje que iban y venían y se convertían en medios necesarios para mantener el sustento y el pulso cotidiano de una isla a la que, entonces, como ahora -aunque ya tenga aeropuerto-, el mar siempre fue el camino.

Desde niño, unas veces con sus padres y otras al cuidado de su niñera, Alberto paseaba por la playa, las proximidades del Roque de la Hila y el incipiente muelle, en el que atracaban los históricos correíllos negros, los mismos en los que el distinguido académico emprendió un día viaje a Las Palmas para continuar sus estudios. Y entre aquellos barcos, uno en especial: Viera y Clavijo y su sempiterno capitán, Eliseo López Orduña.

Huérfano de padre, Alberto Darias decidió estudiar Filosofía y Letras en la Universidad de La Laguna, en la que se licenció en 1971 y se doctoró en Historia del Arte, por la misma Universidad, en 1985, con una tesis titulada Arquitectura y arquitectos en las Canarias Occidentales (1874-1936), convertida en el punto de partida para el conocimiento de lo que después vendría acerca de la investigación del patrimonio arquitectónico de Canarias.

De aquella etapa tan intensa y fructífera, Alberto Darias se ganó el cariño, el afecto y el respeto de una de las más grandes personalidades que ha tenido la Universidad española: Jesús Hernández Perera, quien mucho y bien influyó en el brillante quehacer de su joven discípulo.

Durante una década, Alberto Darias fue archivero del Colegio de Arquitectos de Canarias, maestro de ceremonias de la Universidad de La Laguna y, en su especialidad, conferenciante constante, destacado y distinguido en distintas universidades nacionales y extranjeras, miembro del Comité Nacional Español de ICOMOS, de tribunales de tesis doctorales y de oposiciones y asesor en la recuperación y restauración de edificios emblemáticos.

Sus líneas de investigación abarcan diversos aspectos sobre su gran vocación, la arquitectura y el patrimonio, en los que es una reconocida autoridad, así como en  otros temas histórico-artísticos de Canarias, la Península, Portugal, Italia, Francia, Finlandia, Marruecos y Venezuela, por sólo citar algunos casos concretos. En la actualidad trabaja, entre otros proyectos, en el país magrebí sobre las fortalezas de origen luso-españolas que jalonan la costa atlántica de dicho territorio.

Relacionar su participación en proyectos de I+D nacionales e internacionales, así como en inventarios y un largo etcétera de actuaciones profesionales por él dirigidas, sería una ardua tarea. Lo mismo que las numerosas publicaciones, ya sea en forma de libros –varios de ellos en coautoría con su esposa, Teresa Purriños Corbella- o ponencias, coloquios, capítulos, artículos en anuarios y revistas especializadas, se convertiría, asimismo, en un empeño extenso.

Entre otras publicaciones del profesor Darias Príncipe, además de su tesis doctoral con prólogo de Jesús Hernández Perera, hay que citar las siguientes: Arte e historia en la sede del Parlamento de Canarias; La Gomera, espacio, tiempo y forma; Arte, religión y sociedad en Canarias: la Catedral de La Laguna, con prólogo de Pedro de Navascués; El Casino de Santa Cruz (1840-1990), en coautoría con Agustín Guimerá Ravina; Mar y ocio en la España contemporánea: El Real Club Náutico de Tenerife (1902-1994); La imagen de Canarias en la vanguardia regional: Historia de las ideas artísticas (1898-1930); La rada y puerto de San Sebastián de La Gomera (1492-1992), Lugares colombinos de la villa de San Sebastián [Historia y evolución], el primer tomo de Ciudad, Arquitectura y Memoria Histórica (1500-1981) y El Parlamento de Canarias.

Es miembro de honor y académico de varias instituciones destacadas, entre las que figura la Academia Canaria de Ciencias de la Navegación, a la que se incorporó en febrero de 2010.  

Concluido el programa de su primera visita oficial a Canarias, el embajador de Finlandia en España, Markku Keinänen alargó un día más su estancia en Tenerife, con carácter privado, para conocer el Parque Nacional de las Cañadas del Teide, que visitó por primera vez en unión de su familia y del cónsul en Santa Cruz de Tenerife, Juan Carlos Díaz Lorenzo. 

La visita se efectuó el día 27 de octubre y consistió en un recorrido por el emblemático espacio natural, contando con el apoyo de una guía excepcional: la bióloga Cristina Molina Cedrés, perteneciente al personal técnico dependiente de la Consejería de Medio Ambiente del Gobierno de Canarias. Todo ello, hay que decirlo, gracias al interés y la atención del director del Parque Nacional, Manuel Durbán Villalonga. 

La bióloga Cristina Molina hizo de guía pefecta de la visita

La familia Keinänen y el cónsul Díaz Lorenzo

El Parque Nacional del Teide, declarado el 22 de enero de 1954, es el mayor y más antiguo de los parques nacionales de Canarias. Desde el 28 de junio de 2007 figura como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO y figura entre los doce tesoros de España. En la actualidad, y después de diferentes revisiones y ampliaciones, ocupa una superficie de 18.990 hectáreas y pertenece al término municipal de La Orotava. Es, asimismo, el más visitado de Canarias, con unos tres millones de personas anuales. 

El volcán Teide, con sus 3.718 metros de altitud, es el pico más alto de Canarias y de España. Se trata, además, del tercer volcán más grande del mundo desde su base, sólo superado por dos volcanes hawaianos: Mauna Loa y Mauna Kea. Próximo al Teide se encuentra la segunda montaña más alta de Canarias, el denominado Pico Viejo (3.135 m.), siendo ambas las únicas del archipiélago que superan los tres mil metros de altitud. 

Desde el punto de vista geomorfológico, el Parque Nacional está formado por dos grandes depresiones coronada por el Teide. Numerosas coladas de diferentes erupciones junto a las montañas y volcanes repartidos por todo el espacio conforman un paisaje característico, en el que destacan el alto de Guajara, el Llano Ucanca, las Siete Cañadas, La Fortaleza, los Roques de García y el Pico Viejo, llamado también Chahorra. 

La flora ha sido estudiada por científicos como Alexander von Humboldt y Eric R. Sventenius. Existen endemismos de carácter insular, regional y local, y cuenta con 11 hábitats de interés comunitario, que ocupan el 75% de su superficie. En cuanto a la fauna se contabilizan unas 26 especies que habitan de toda temporal o permanente a lo largo del año. 

En el Parque Nacional del Teide se han localizado e inventariado 168 plantas superiores, de las cuales 58 son consideradas endémicas canarias. Según el Catálogo Nacional de Especies Amenazadas, tres de ellas se encuentran en peligro de extinción y otras doce en situación vulnerable. Para muchos endemismos, las paredes y oquedades de las Cañadas suponen un verdadero refugio para su conservación, entre las que destaca el tajinaste rojo, cuya floración se convierte en un extraordinario espectáculo. Por encima de los 2.400 m de altitud crece una planta muy frágil y delicada, conocida como la violeta del Teide, clasificada entre las que florecen a mayor altitud de todo el territorio nacional. 

La imagen más conocida de El Teide, desde los Roques de García

Panorámica del Llano de Ucanca, en un día espléndido

El Teide, visto desde una de las siete cañadas

En Las Cañadas se encuentra el mejor registro de la historia del hombre en Tenerife, debido a la gran riqueza en yacimientos arqueológicos. El Teide y Las Cañadas no sólo tenían un significado espiritual para los guanches, sino que esta zona era también un recurso fundamental para la supervivencia en determinadas épocas del año. En verano se producía en estos pastos de alta montaña una concentración de ganados y pastores procedentes de toda la isla. 

Los guanches lo llamaban Echeyde, que significaba «morada de Guayota, el Maligno». Según la tradición, Guayota secuestró al dios del Sol, Magec, y lo llevó consigo al interior del Teide. Entonces, la obscuridad se apoderó de la isla y los guanches pidieron ayuda a Achamán, su ser supremo celeste. El dios consiguió derrotar al Maligno, sacar al Sol de su cautiverio y taponar la boca de Echeyde. Dicen la leyenda que el tapón que puso Achamán es el llamado Pan de Azúcar, el último cono que corona el Teide. 

El cráter de Montaña Mostaza en primer término y, al fondo, El Teide

Parece que la leyenda guanche coincide en el tiempo con la que fuera la última gran erupción en el mismo pico del Teide. Según relata Fernando de Colón en su libro Historia del Almirante cuando las carabelas pasaron cerca de Tenerife, el 24 de agosto de 1492, en su escala en La Gomera camino de América, vieron salir grandes llamaradas de la montaña más alta de todas las islas. 

En 1798 se produjo la que fuera última gran erupción dentro de los límites del Parque Nacional y que formó las denominadas Narices del Teide. Durante tres meses, salieron 12 millones de metros cúbicos de lava por una grieta orientada en dirección noroeste-suroeste en las laderas de Pico Viejo. 

En 1981 el parque nacional fue reclasificado y se estableció un régimen jurídico especial. En 1989, el Consejo de Europa le concedió el Diploma Europeo, en su máxima categoría. Este reconocimiento a la gestión y a la conservación ha sido posteriormente renovado en 1994, 1999 y 2004. 

El martes 26 de octubre, después de cumplimentar en sus despachos oficiales a las primeras autoridades de Canarias y de Tenerife, en las visitas protocolarias relacionadas en la crónica anterior, el embajador de la República de Finlandia en España, Markku Keinänen, se reunió en un almuerzo ofrecido por la junta directiva del Grupo Microfusión, empresa líder en Canarias en el sector de las nuevas tecnologías y con una gran actividad en el desarrollo de proyectos de alto valor añadido y tecnológico.

El embajador estuvo acompañado por los cónsules María Sorsa y Juan Carlos Díaz Lorenzo y, por parte del Grupo Microfusión, asistieron Miguel Aznárez Agustín  (presidente), Domingo Cabeza Guerra (director general), Luis Cabeza Guerra (director de Desarrollo de Negocios), Daniel Hernández Rodríguez (director general de General de Software de Canarias), Javier Díaz Spínola (director general de Sinergia de 3) y Dileep Bhavnani (representante del accionista Ram Bhavnani).

Durante el encuentro, que transcurrió en un ambiente muy cordial y con perspectivas interesantes, los asistentes conversaron sobre el papel tecnológico de Finlandia y su proyección futura, así como la trayectoria seguida por el Grupo Microfusión y sus inquietudes, estando en plena disposición para avanzar y aceptar nuevos desafíos tecnológicos.

Los directivos del Grupo Microfusión, con el embajador Keinänen y los cónsules en Canarias

En 1982, cuando comenzó a nacer la microinformática como herramienta eficaz para soluciones empresariales complejas, un reducido grupo de profesionales comienza su andadura, desarrollando diferentes soluciones de gestión en dichos entornos.

Seis años después, tras  varios intentos por su visión empresarial para consolidar un proyecto, este se hace realidad y se consolida, con la  fundación en el año 1988, de la sociedad Microfusión Informática,  empresa matriz del actual Grupo Microfusión, con apoyo de  un importante grupo industrial de empresas canarias relacionadas con la construcción y la exportación.

A medida que Microfusión Informática va experimentando un importante crecimiento y la captación de nuevos clientes, el proyecto gana solidez, lo que permite que continúen incorporándose nuevos profesionales, con lo que empieza la gran familia que es hoy el Grupo Microfusión.

En 1993 se produjo una importante crisis económica tanto en la construcción como en la exportación, con lo que los accionistas de Microfusión vinculados al grupo industrial venden su participación a los accionistas trabajadores y profesionales, que deciden continuar con el proyecto, aportando éstos mayor agilidad y mejor visión del tipo de negocio, con lo que rápidamente se experimenta un crecimiento sostenido del proyecto.

En 1998, por motivos de especialización y separar el negocio de software del resto de actividades relacionadas con la informática, se funda Sinergia de 3, empresa especializada en la prestación de servicios de sistemas, comunicaciones e infraestructura de hardware.

En 2007, tras la consolidación del Grupo Microfusión como un referente del sector TIC en Canarias, con veinte años de experiencia y una importante cartera de clientes tanto en el sector privado como público, se produce la compra de otra empresa referente en el sector, General de Software de Canarias, hasta entonces propiedad de CajaCanarias, una de las entidades financieras más importantes de Canarias,  entrando esta última junto a los comerciantes e inversores financieros hindúes afincados en Tenerife, Casa Kishoo.

Esta importante unión consolida al Grupo Microfusión, dotándolo de la fortaleza necesaria para competir con las máximas garantías dentro de un entorno cada vez más globalizado, y en el que se requieren organizaciones con proyección,  importante solidez patrimonial y capacidad para afrontar diferentes estrategias de futuro.

Ese mismo año se crea Microfusión Bangalore en India, una “software factory” de  apoyo a las diferentes áreas de negocio de Microfusión informática, dándole una proyección internacional al proyecto, junto con uno de los productos estrellas del grupo su sistema de reservas marítimo y aéreo.

En la actualidad, el Grupo Microfusión cuenta con 344 empleados, principalmente ingenieros de software e ingenieros de Sistemas y Comunicaciones. En 2009 registró un volumen de negocio de 14,8 millones de euros.

Jornada de visitas oficiales

noviembre 3, 2010

En la mañana del 26 de octubre, y de acuerdo con el programa previsto, el embajador de Finlandia en España, Markku Keinänen, cumplimentó en sus despachos oficiales a las primeras autoridades de Canarias y de la isla de Tenerife, siendo acompañado por los cónsules María Sorsa y Juan Carlos Díaz Lorenzo.

Como había margen de tiempo suficiente, antes del inicio de las visitas se hizo un breve recorrido en automóvil por el centro de la ciudad y su puerto –en el que se encontraba atracado el crucero británico Azura-, viendo los principales edificios, como el Auditorio y el Recinto Ferial de Tenerife, obras del arquitecto Santiago Calatrava; TEA, iglesia de la Concepción, Cabildo Insular, Plaza de España, alameda del Duque de Santa Elena, Avenida de Anaga, Autoridad Portuaria, Rambla de Santa Cruz (antigua rambla General Franco), Hotel Mencey, Avenida del 25 de Julio (conmemorativa de la derrota de Nelson, en 1797), palacetes de la Plaza de los Patos y barrio de los Hoteles, antigua iglesia anglicana, parque García Sanabria, Capitanía General y Plaza de Weyler.

Auditorio de Tenerife, icono de la ciudad y de la isla

La primera visita fue al alcalde de Santa Cruz de Tenerife, quien, por razones de agenda, delegó el recibimiento en el concejal Antonio Bello, encargado habitualmente de las relaciones públicas del ayuntamiento de la capital tinerfeña. Casi media hora de conversación con el citado político tinerfeño, que lleva 32 años en la vida pública y en la que se abordaron diferentes temas de interés. La reunión se celebró en una de las salas del palacio municipal, un edificio de bella factura del siglo XIX y concluyó con la firma del embajador en el Libro de Oro de la ciudad. 

El concejal Antonio Bello recibe al embajador Keinänen

El concejal Antonio Bello explica las cualidades de Santa Cruz

La visita se celebró en la sede oficial del Ayuntamiento

La segunda visita fue al presidente del Cabildo Insular de Tenerife, Ricardo Melchior Navarro. Grato encuentro con el veterano político tinerfeño, en el que se abordaron, sobre todo, cuestiones relacionadas con el turismo, pues el Cabildo es el responsable, en primera instancia, de la promoción turística de la isla.

El embajador Keinänen y el anfitrión profundizaron en el indudable atractivo que tiene Tenerife entre los finlandeses desde hace más de cincuenta años y en la trayectoria de la colonia residente en la isla, sobre todo en Puerto de la Cruz y alrededores. Antes de la despedida, visitaron el salón noble del Palacio Insular –un edificio emblemático obra del arquitecto tinerfeño José Enrique Marrero Regalado- en el que se encuentra un gran mural del pintor José Aguiar. Al igual que ocurrió en el Ayuntamiento, el embajador Keinänen estampó una dedicatoria en el Libro de Oro del Cabildo Insular.

Ricardo Melchior recibe al embajador Keinänen

El presidente del Cabildo obsequió al embajador un libro sobre Tenerife

El embajador Keinänen firma en el Libro de Oro del Cabildo Insular

La tercera visita fue al presidente del Parlamento de Canarias, Antonio Castro Cordobez. De acuerdo con el Estatuto de Autonomía, el Parlamento tiene su sede permanente en Santa Cruz de Tenerife, en un edificio del siglo XIX construido por encargo de una sociedad musical y que, en el transcurso del siglo XX, fue la sede de la Diputación de Canarias, entre otras instituciones.

El embajador y los cónsules Sorsa y Díaz Lorenzo, en el hall del Parlamento de Canarias

La conversación entre el presidente del Parlamento y el embajador Keinänen giró en torno a temas turísticos, europeos y la preocupación por el futuro del plátano canario, tema que Antonio Castro Cordobez conoce muy bien, dada su procedencia de una isla eminentemente agrícola como La Palma y el hecho de que en legislaturas anteriores fuera consejero de Agricultura del Gobierno de Canarias. Antes de despedirse, el embajador Keinänen escribió un mensaje de admiración y gratitud en el Libro de Oro del Parlamento de Canarias.

El presidente del Parlamento y el embajador, durante la audiencia

El embajador firma en el Libro de Oro del Parlamento de Canarias

Foto de los visitantes con el presidente del Parlamento de Canarias

La cuarta y última visita fue al presidente del Gobierno de Canarias, Paulino Rivero Baute, en la sede de Presidencia en la capital tinerfeña, un edificio vanguardista en cuyo patio se encuentra toda la estructura de madera –escalera, corredores y cristaleras- de la Casa Hamilton, edificio ubicado en la calle de La Marina y derribado a comienzos de los años setenta del siglo XX. A la reunión también asistió la comisionada de Asuntos Exteriores del Gobierno de Canarias, Elsa Casas.

El encuentro con el presidente del Gobierno duró unos 45 minutos y en él se abordaron diferentes cuestiones, aunque el principal fue el turismo: un 5 % de la población de Finlandia viene a Canarias de vacaciones y en el pasado mes de septiembre la cifra se incrementó en un 15 %.

Las islas son muy conocidas en el país nórdico y aunque muchos finlandeses han probado otros destinos muy lejanos, han vuelto a elegir de nuevo la opción de Canarias. “Creo que, en cuanto a los finlandeses, el turismo crecerá sin hacer grandes esfuerzos. Se trata de un destino amable y acogedor, el tiempo es bueno, la gente es buena, eso ya es suficiente para nosotros”, dijo el embajador a los medios de comunicación que le esperaban a la salida.

El presidente del Gobierno de Canarias y el embajador Keinänen, en su encuentro

Foto de familia en Presidencia del Gobierno, al finalizar la visita

También se habló de política y economía, así como del desarrollo tecnológico de Finlandia, de su elevado nivel educativo –aspecto en el que se profundizará en próximos encuentros, en Canarias o en Madrid- y de la presencia de la colonia finlandesa en el archipiélago y, en este caso concreto, en Tenerife, cuyas autoridades se mostraron muy satisfechas por el comportamiento, el trato y la integración después de tantos años. Por último, el embajador Keinänen manifestó que su país está preparado para abrir “otras vías” para fomentar las relaciones comerciales con Canarias.

Durante su estancia en las islas de La Palma y Tenerife, el embajador de la República de Finlandia en España, Markku Keinänen, se reunió con diversos sectores de la colonia finlandesa residente en ambas islas.  Este era uno de los objetivos principales de su primer viaje oficial y los encuentros se celebraron en la tarde del día 23 de octubre en La Palma y durante todo el día 25 en Puerto de la Cruz (Tenerife).

Algo más de un millar de finlandeses residen con carácter habitual en la provincia de Santa Cruz de Tenerife. Por razones obvias, la mayor parte de ellos están establecidos en la isla de Tenerife, tanto en la comarca norte (Tacoronte, El Sauzal, La Matanza, La Victoria, Santa Úrsula, Puerto de la Cruz, La Orotava, Los Realejos, San Juan de la Rambla, La Guancha, Icod, Garachico y Buenavista del Norte), como en la comarca sur, en el entorno de Los Cristianos y Playa de las Américas.  

También hay finlandeses residiendo en la capital de la isla y de la provincia, Santa Cruz de Tenerife, ciudad en la que, hace unos treinta años, fue construido un edificio novedoso conocido como “Casa Finlandia”, así como en La Laguna y El Rosario, municipios colindantes con el área metropolitana.  

En esta ocasión, el primer encuentro con la colonia finlandesa se celebró en Puerto de la Cruz, previendo el embajador Keinänen hacerlo también en una próxima visita en el sur de Tenerife, ocasión que aprovechará para conocer a los finlandeses establecidos en La Gomera y El Hierro. 

Foto de familia del encuentro con finlandeses en La Palma

Según el registro consular, unos diez finlandeses viven con carácter fijo en la isla de La Palma. Una representación de ellos acudió al encuentro con el embajador Keinänen, que ha sido el primero, en el ejercicio de su cargo, en visitar dicha isla. El encuentro transcurrió en un ambiente muy agradable, en torno a un café. 

Los primeros turistas finlandeses llegaron a la isla de La Palma en 1953 y se alojaron en el recién estrenado Parador de Turismo, en la avenida marítima de Santa Cruz de La Palma. Por entonces la isla no tenía aeropuerto, de modo que hicieron el viaje en barco. Aquel grupo estuvo organizado por Kristoffer Öhquist, quien años más tarde sería cónsul de Finlandia en Santa Cruz de Tenerife. 

Durante todo el lunes 25 de octubre, el embajador mantuvo diversas reuniones con la colonia finlandesa en el norte de Tenerife. El recorrido comenzó con visitas a los empresarios radicados en la ciudad turística, continuando con la directiva del Club Finlandia de Tenerife (Suomi-Kerho) y una nutrida representación de la colonia finlandesa –más de doscientas personas- que se dieron cita en el hotel Valle Luz. Con todos ellos conversó el embajador, escuchando sus impresiones y sus opiniones. 

El embajador, con los cónsules Sorsa y Díaz Lorenzo, los ex cónsules Öhquist y Álvarez Hamilton y Ulla Santavuori

El ex cónsul Álvarez Hamilton obsequió al embajador y la cónsul Sorsa con un libro sobre Tenerife

El embajador Keinänen conversa con el ex cónsul Öhquist

El embajador Keinänen con los cónsules Sorsa y Díaz Lorenzo y los ex cónsules Öhquist y Álvarez Hamilton

El almuerzo reunió a los ex cónsules de Finlandia en Santa Cruz de Tenerife, Kristoffer Öhquist (1973-1998) y Julio Álvarez Hamilton (1998-2007), así como el actual titular, Juan Carlos Díaz Lorenzo, y la cónsul en Las Palmas, María Sorsa. El embajador Keinänen ya conocía a Kristoffer Öhquist desde su anterior etapa en la embajada, hace veinte años. Resultó muy emotivo el encuentro, al que también asistió Ulla Santavuori, quien se ocupa de las labores administrativas del consulado en Santa Cruz de Tenerife. 

Reunión con los representantes de la Iglesia finlandesa en Tenerife

A continuación, el embajador Keinänen se reunió con representantes de la Iglesia finlandesa establecida en Tenerife, con quienes intercambió impresiones. El papel de los pastores luteranos y de las personas que les ayudan es de una gran valía para la colonia finlandesa, aspecto que siempre ha sido muy reconocido y valorado tanto por la Embajada como por el Consulado. Además, las magníficas relaciones existentes entre la Iglesia católica y la Iglesia luterana finlandesa permite la celebración de los oficios religiosos en un templo católico de Puerto de la Cruz, al que siempre acuden numerosos fieles.  

Foto de familia con los representantes del Club de Finlandia

El día finalizó con una cena organizada por representantes del Club de Finlandia en Tenerife, en cuyo transcurso se profundizó en las inquietudes expresadas con anterioridad. Tanto el embajador Keinänen como los cónsules Sorsa y Díaz Lorenzo agradecieron la acogida y el interés mostrado y reiteraron su compromiso de ayuda y gestión para el mejor bienestar de la colonia finlandesa establecida en las islas.

Más cerca de las estrellas

noviembre 1, 2010

El embajador de la República de Finlandia en España, Markku Keinänen, realizó su primera visita oficial a Canarias entre los días 23 y 27 de octubre, conociendo, en esta oportunidad, las islas de La Palma y Tenerife. El embajador viajó acompañado de su esposa, Anna-Maija y de su hija menor, Ilona. Durante su estancia estuvo atendido por los cónsules en Las Palmas, María Sorsa y en Santa Cruz de Tenerife, Juan Carlos Díaz Lorenzo.

El acceso al Roque de los Muchachos se hizo por la carretera de Mirca, abierta expresamente para acceder a la cumbre máxima de la isla. Son 36 kilómetros de curvas y más curvas hasta alcanzar Los Andenes, en el que existe un mirador que permite apreciar una panorámica extraordinaria de la grandiosa Caldera de Taburiente. Pero el día de la visita, la niebla había invadido el cráter más grande del mundo y no se pudo apreciar su imponente espectáculo. Aún ásí, en un breve parada en el mirador allí existente, el embajador Keinänen contempló los impresionantes y altísimos escarpes que rodean el circo de Taburiente.

El embajador Keinänen contempla los escarpes de la Caldera de Taburiente

El primer tramo de su viaje fue en la isla de La Palma, a la que llegó el día 23 de octubre, procedente de Madrid, vía Tenerife Norte. El embajador atendía así una invitación del Instituto de Astrofísica de Canarias (IAC) para conocer los telescopios NOT y GRANTECAN, ubicados en el Observatorio del Roque de los Muchachos, situado al borde del Parque Nacional de la Caldera de Taburiente, a 2.396 metros de altitud.

Panorámica del observatorio del Roque de los Muchachos, situado en el borde de la Caldera de Taburiente

Telescopio NOT, en el que participa Finlandia

El Telescopio Óptico Nórdico (NOT, Nordic Optical Telescope, en inglés) entró en servicio en 1989. Está dirigido por un comité científico formado por Dinamarca, Noruega, Suecia, Finlandia e Islandia, aunque cualquier astrónomo puede utilizar sus instalaciones en función de los acuerdos internacionales. Durante la visita hizo de anfitrión el científico finlandés Tapio Pursimo, quien realizó una somera explicación de la instalación, sus funciones y sus éxitos.

El embajador atiende las explicaciones de Tapio Pursimo

Telescopio NOT de 2,5 metros de diámetro

Foto para el recuerdo de la visita al telescopio NOT

Empresas que participaron en la construcción del NOT

Placa en memoria del científico Verkkoniemi, fallecido en La Palma

El espejo tiene un diámetro de 2,56 metros, acoplado a una serie de instrumentos: ALFOSC (espectógrafo de objetos difusos), NOTcam (cámara y espectógrafo de rayos infrarrojos HgCdTe Hawaii), MOSCA (cámara CCD), SOFIN (espectógrafo CCD de alta resolución, hasta R=170.000), StanCam (cámara CCD permanente), LuckyCam (cámara de alta velocidad y bajo ruido L3 Vision para imágenes afortunadas), TURPOL (fotopolarímetro UBVRI) y FIES (espectrógrafo Echelle de alta resolución, hasta R=60.000 y gran estabilidad térmica y mecánica).

Panorámica del GRANTECAN, el mayor telescopio del mundo

El Gran Telescopio Canarias, conocido también como GRANTECAN o GTC, es un proyecto español de carácter internacional liderado por el Instituto de Astrofísica de Canarias (IAC), que culminó con la construcción del mayor telescopio óptico del mundo. En su financiación participan el Ministerio de Ciencia, Innovación y Tecnología y el Gobierno de Canarias a través de Fondos Europeos de Desarrollo Regional (FEDER), la Universidad de Florida (EE.UU.), la Universidad Nacional Autónoma de México (IA-UNAM) y el Instituto Nacional de Astrofísica, Óptica y Electrónica (INAOE) de Puebla. La participación extranjera representa en la actualidad un 10 % y está limitada al 30 %.  Para el fomento del proyecto y la construcción del GTC, en 1994 se creó la sociedad anónima GRANTECAN, S. A.

Las obras comenzaron en 2000. El telescopio vio su primera luz oficial en la madrugada del 13 al 14 de julio de 2007 y comenzó su producción científica a principios de 2009. El 24 de julio del citado año fue inaugurado oficialmente en presencia de los Reyes de España.

La visita del embajador estuvo atendida por el director general del GRANTECAN, Pedro Álvarez Martín, quien, con sus extraordinarios conocimientos y su exquisito trato, cautivó el máximo interés del ilustre visitante, quien se mostró altamente satisfecho e interesado para que en Finlandia se conozca con mayor profundidad la existencia del IAC y de los observatorios del Roque de los Muchachos e Izaña.  

Pedro Álvarez Martín, director general del GRANTECAN

El embajador Keinänen y el cónsul Díaz Lorenzo atienden las explicaciones del científico Pedro Álvarez

El embajador Keinänen, Pedro Álvarez Martín, Tapio Pursimo y los cónsules Sorsa y Díaz Lorenzo, en la sala de control del GTC

El telescopio observa la luz visible e infrarroja procedente del espacio y tiene un espejo primario de 10,4 metros, segmentado en 36 piezas hexagonales vitrocerámicas, de 1,9 m entre vértices, 8 cm de grosor, y 470 kg de peso cada uno. El sistema óptico se completa con dos espejos (secundario y terciario) que forman imagen en siete estaciones focales. Los espejos están construidos con un material especial fabricado en Alemania por la empresa Schott llamado Zerodur, un tipo de vitrocerámica que apenas sufre alteraciones con los cambios de temperatura y, por lo tanto, evita que las imágenes sufran deformaciones. Su pulido se hizo con un límite de error superficial de 15 nanómetros (millonésima de milímetro), es decir, un tamaño 3.000 veces más fino que un cabello humano.

Parte trasera del telescopio GRANTECAN

Parte delantera del telescopio. Detrás están los espejos primarios

El telescopio GRANTECAN es una instalación que impresiona

Para recoger los datos está equipado con los siguientes instrumentos de primera generación: OSIRIS (cámara y espectrógrafo de resolución baja e intermedia, operando en el rango visible) y CanariCam (cámara y espectógrafo en el infrarrojo térmico). Los instrumentos de segunda generación previstos son: EMIR (espectrógrafo multiobjeto para trabajar en el infrarrojo) y FRIDA (cámara espectrógrafo para el infrarrojo cercano que aprovechará el haz corregido por el sistema de óptica adaptativa).

Este telescopio permite conocen con mayor precisión asuntos tales como los agujeros negros, las estrellas y galaxias más alejadas del universo y las condiciones iniciales tras el Big Bang. Bastante antes de lo inicialmente previsto, el telescopio empezó a aportar importantes avances en todos los campos de la astrofísica.