Invitados por el director general del Instituto de Astrofísica de Canarias, Francisco Sánchez, los miembros del Cuerpo Consular acreditado en Santa Cruz de Tenerife tuvieron la oportunidad de visitar recientemente el observatorio de El Teide, situado en Izaña, donde fueron atendidos por su responsable, Miquel Serra.

La visita, que incluyó una cena, duró unas cinco horas y resultó muy amena debido a la presentación y las respuestas del científico Serra a la cantidad de preguntas planteadas por los visitantes, así como a la observación mediante telescopio de la Luna y del planeta Júpiter, siendo posible, además, apreciar la disposición de tres satélites.

La astrofísica en Canarias empezó a comienzos de la década de los sesenta en este Observatorio, en la zona de Izaña, a 2.390 metros de altitud, en un paraje en el que confluyen los términos municipales de La Orotava, Fasnia y Güímar. El primer telescopio para realizar estudios de luz zodiacal, la luz dispersada por la materia interplanetaria, empezó a funcionar en 1964.

Su situación geográfica, entre los observatorios solares del este y del oeste, unida a la transparencia y excelente calidad astronómica de su cielo, han contribuido a que el Observatorio del Teide se reserve preferentemente al estudio del Sol, concentrándose en él los mejores telescopios solares europeos.

El Observatorio del Teide dispone de un centro de visitantes, resultado de la conversión de una cúpula vacía, que ha sido dotada de elementos para la divulgación científica. Con un aforo para unas cuarenta personas, se utiliza para explicar a los visitantes en qué consiste un observatorio, cómo funcionan los telescopios y la importancia que la astronomía tiene para el hombre.

Los invitados, junto a Miquel Serra, en uno de los telescopios

La decana del Cuerpo Consular agradece las atenciones de Miquel Serra

Fotos: Dr. Francisco Perera

El Consejo de Sociedades de Diseño Industrial (ICSID, iniciales en inglés) anunció ayer, en el marco del Congreso Mundial de Diseño celebrado en Singapur, que la Capital Mundial del Diseño 2012 será Helsinki, elegida entre 46 ciudades de 27 países.

La candidatura de la capital finlandesa, que se impuso ante la otra ciudad finalista, Eindhoven (Holanda), se basa en el lema Open Helsinki – Embedding Design in Life (Helsinki abierta, incorporando el diseño en la vida diaria), a través del que se anima a mirar al proceso mismo del diseño como un usuario, cuya decisión contribuir a un mundo mejor.

Durante 2012, el proyecto finlandés estará arropado en la ciudad de Helsinki por un programa de actividades para acercar el diseño al día a día de la gente, encuentros con diseñadores de todo el mundo, así como eventos «satélite» en otros países. El principal encuentro se celebrará en la sala Casa Finlandia, diseñada por el gran arquitecto Alvar Aalto. 

El alcalde de la capital finlandesa, Jussi Pajunen, manifestó, al conocer la noticia, que “es un logro magnífico para Helsinki: un reconocimiento importante tanto para nosotros como para las localidades colaboradoras de Espoo, Vantaa, Kauniainen y Lahti, además de las organizaciones y personas implicadas”.

De acuerdo con los protocolos establecidos, Helsinki acogerá a un millar de jóvenes diseñadores de todo el mundo con el objetivo de que proporcionen otras tantas soluciones para desarrollar una efectiva colaboración internacional. Se ha calculado que unas cien mil personas acudan a las celebraciones durante el transcurso del año 2012. 

La noticia se produce en el momento en que Madrid acoge el Mes del Diseño Finlandés, con un programa de actos que ofrece la posibilidad de conocer el diseño y la arquitectura del país nórdico.  La organización está a cargo del Instituto Iberoamericano de Finlandia en colaboración con la Embajada de Finlandia en Madrid.

En Finlandia el diseño forma parte de la vida cotidiana y se basa en una tradición de valores que son atemporales como la funcionalidad, la ecología, la sencillez y la belleza de los objetos cotidianos. En el panorama actual del diseño finlandés destaca la interdisciplinariedad que abarca desde la gráfica a la arquitectura, pasando por el diseño de productos industriales,  la moda o el diseño de servicios.

Junto a los grandes creadores como Alvar Aalto y grandes firmas,  caso de Marimekko, el Mes del Diseño Finlandés -que abarca el otoño de 2009- nos acerca al presente y futuro del diseño en Finlandia, que, siempre innovador, avanza hacia la interactividad con el usuario y sus aportaciones al producto final. El programa  se completa con diversas actividades culturales que incluyen un recorrido creativo a través del fascinante país nórdico. 

Panorámica del centro histórico de la ciudad de Helsinki

 

El Honorable Cuerpo Consular acreditado en Santa Cruz de Tenerife celebró el pasado día 19 noviembre un almuerzo de cortesía con la consejera de Sanidad del Gobierno de Canarias, Mercedes Roldós Caballero, quien, entre otros aspectos, expuso a los asistentes las medidas, actuaciones y protocolos establecidos para la atención sanitaria a residentes y transeúntes extranjeros.

La consejera agradeció la invitación del Cuerpo Consular, que en la actualidad preside, en calidad de decana, la señora cónsul de Guatemala en Santa Cruz de Tenerife, Silvia Vassaux Chinchilla. El encuentro transcurrió en un ambiente de máxima cordialidad.

Foto de familia con la consejera de Sanidad, Mercedes Roldós

 

Los cónsules de Finlandia en Las Palmas y Santa Cruz de Tenerife, María Sorsa y Juan Carlos Díaz Lorenzo, respectivamente, mantuvieron el pasado martes, 17 de noviembre, un encuentro en Puerto de la Cruz con las guías de turismo de los “touroperadores” nórdicos que operan con turismo finlandés en la provincia tinerfeña, con la finalidad de cambiar impresiones y orientaciones acerca de los servicios consulares, novedades normativas, procedimientos y otros aspectos.

La reunión, que transcurrió en un ambiente de gran cordialidad, contó con la asistencia, además, de representantes del Club de Finlandia en Tenerife y del pastor de la Iglesia luterana, todos los cuales destacaron el papel de los respectivos consulados como punto de apoyo permanente y su actuación y apoyo ante cualquier contingencia. Una reunión similar se había celebrado, unos días antes, por parte de la cónsul María Sorsa –que tomó posesión de su cargo a comienzos del pasado septiembre- con los “touroperadores” de Gran Canaria.

Los asistentes al encuentro, en una foto de familia

Pedro Duque García

noviembre 10, 2009

Juan Carlos Díaz Lorenzo, cónsul de Finlandia en Santa Cruz de Tenerife

Cuando todavía no nos hemos recuperado del impacto que nos produjo la noticia del fallecimiento de Juan Jesús García-Sanjuán y Ruiz Benítez de Lugo, ex cónsul de Italia en esta capital, nos llega la triste nueva de otro viejo y buen amigo, Pedro Duque García, quien durante muchos años, entre otras funciones, ejerció el cargo de cónsul de la República del Brasil en Santa Cruz de Tenerife.

Cuando le conocí, hace unos 25 años, Pedro era un hombre muy dinámico y activo al frente de su empresa importadora, una de las más importantes y de arraigada solera de Canarias. La bandera de Brasil ondeaba desde la sede social de la firma comercial en la calle del Castillo. Por entonces trabajaba yo en DIARIO DE AVISOS y me ocupaba de la sección portuaria, por lo que, desde que supe la noticia, acuden a mi mente multitud de recuerdos en los que Pedro Duque fue protagonista o estuvo presente de manera destacada, como las escalas del buque-escuela brasileño Custodio de Mello, su contumaz protagonismo al frente del Consejo de Usuarios del Transporte Marítimo de Canarias, del que fue su primer presidente y puso en jaque a Copecan; su relevante papel en la CEOE de Tenerife en tiempos de Rodolfo Machado von Tchusi y, además, en su constante actividad profesional, logrando el fortalecimiento de la empresa Pedro Duque Canarias, que comercializa las excelencias de los productos Nestlé, Bodegas Marqués de Cáceres y Lipton’s, por citar sólo algunos ejemplos destacados.

Sabía, desde hacía tiempo, de su delicado estado de salud, hasta el punto de que le obligó a retirarse por completo, renunciando incluso el consulado del Brasil, que pasaría después a mi estimado paisano y colega Antonio de la Bárcena Jaubert y también recuerdo perfectamente la última vez que le vi a bordo de un avión de Iberia en un vuelo Madrid-Tenerife, en compañía de su esposa, cuando ya las muestras de su enfermedad eran muy evidentes.

Pedro Duque, un hombre de su tiempo -serio, riguroso y estricto, y también educado, correcto y afable-, fue un empresario de éxito que supo multiplicar la herencia paterna con más de un siglo de historia. Su nombre y el de la tradición familiar que representa están indisolublemente unidos al progreso comercial de Tenerife y de Canarias. Fue, además, un buen amigo y también para él quiero tener palabras de gratitud y afecto, por el trato y la consideración con que siempre me distinguió durante mi etapa periodística, en la que estuvimos en frecuente contacto y ello me permitió publicar sonadas primicias en las páginas del decano de la prensa de Canarias. Por entonces, hace dos décadas, el puerto era un hervidero constante que generaba noticias de diverso calibre y, entre ellas, los pulsos entre algunos sectores empresariales y sociales de honda raigambre y gran calibre. Al final, como siempre ocurre, aquel envite siguió el derrotero previsto y se convirtió en fondo histórico de hemeroteca.

Ahora, cuando Pedro Duque García ya no está entre nosotros, quiero evocar su memoria con una expresión de afecto, respeto y satisfacción por haberle conocido y tratado tan de cerca y un apretón de manos a modo de emotiva despedida.

Publicado en DIARIO DE AVISOS, 23 de abril de 2009

Gracias, Juan Jesús

noviembre 10, 2009

Juan Carlos Díaz Lorenzo, cónsul de Finlandia en Santa Cruz de Tenerife

Siempre tuve la impresión, corroborada en el transcurso del tiempo, de la impronta relevante y la firme personalidad de Juan Jesús García-Sanjuán y Ruíz Benítez de Lugo, quien, hace unos días, emprendió su última singladura terrenal y nos ha dejado la estela de su fértil memoria y su magisterio fecundo, así como la innegable satisfacción de haberle conocido y tratado en diversas ocasiones. Al igual que sus hermanos y, especialmente, su padre, don Cándido Luis García-Sanjuán, persona por la que siempre he expresado gran aprecio y admiración, Juan Jesús era fiel reflejo y garante de la doctrina paterna, un tinerfeño de altura de miras guiado del más puro sentimiento de buen y bien hacer.
Así comprendo el gran aprecio del que gozaba, testimoniado, como no podría ser de otro modo, en la impresionante manifestación de duelo que siguió a su despedida y el hondo pesar de sus familiares y sus muchos amigos, ante una trayectoria personal y profesional tan dilatada, productiva y eficaz y, aún así, tan llena de vida y de proyectos, de ganas de vivir y de disfrutar merecidamente de lo que había cosechado con tanto empeño y esfuerzo durante toda su existencia.
Por eso, al igual que muchos asistentes a la misa oficiada por el sacerdote Julián de Armas en la iglesia de Nuestra Señora de la Concepción, en la ciudad de La Laguna, se me hizo un nudo en la garganta en el preciso instante en el que uno de sus hijos y una de sus nietas leyeron sendas y emotivas cartas de filial adiós. La segunda no pudo, apenas empezar, contener la tremenda emoción que la embargaba, fiel reflejo del impacto de la personalidad y la memoria de su abuelo, compendio de tantos y felices momentos vividos al amparo de un hombre anchurosamente humano, generoso y afectivo.
Me queda la satisfacción, como a todos sus amigos, de haber compartido con él momentos entrañables, pero, sobre todo, la inmensa suerte de escucharle y disfrutar su gesto permanente de afabilidad, cordialidad y respeto. De sus consejos profesionales y consulares en su etapa como cónsul de la República de Italia, al igual que su hermano Pedro, distinguido amigo y colega y actual cónsul de la República de Chile. De su trayectoria rotaria. De su sentido de la amistad y de su valor y templanza ante la irreversible enfermedad, y la admiración por su lograda paz interior. Digno de su persona. Tuve la oportunidad de saludarle en la calle San José, por última vez, unos días antes de su marcha y, como siempre, era Juan Jesús en esencia.
Al desgranar el rosario de los recuerdos, quiero decirte, estimado amigo, ¡gracias, muchas gracias!. Gracias por todo lo que hiciste por tu familia y por tu tierra, por tu valor y empuje en tus empresas y en tus proyectos, por la generosidad y la afectividad que destilabas en tu corazón de hombre bueno y sabio y en tu sonrisa generosa, por el trato con el que siempre nos concediste, por la fuerza de tus manos, por tus enseñanzas, por tu recia y afirmada personalidad, y también por tu tinerfeñismo auténtico medido en canariedad universal.

La Opinión de Tenerife, 24 de abril de 2009