Juan Carlos Díaz Lorenzo

El Hierro sigue siendo la isla encantadora de siempre y bien merece una visita para disfrutar de su naturaleza, de su gastronomía y, sobre todo, de la tradicional hospitalidad de sus gentes. En El Hierro reina la paz y la tranquilidad que le caracteriza y la razón última de la erupción del volcán submarino que acontece en el Mar de las Calmas se convierte en un atractivo más, a los tantos y tan demostrados que ya tiene la isla.

Atendiendo a una amable invitación del Cabildo Insular de El Hierro, una nutrida representación formada por 34 colegas del Cuerpo Consular acreditado en Santa Cruz de Tenerife y en Las Palmas viajamos el 22 de febrero, miércoles de ceniza, a la Isla del Meridiano o Séptima Isla, como la denominaba el entrañable y siempre bien recordado cronista herreño José Padrón Machín.

Ha sido, además, la primera visita institucional consular en Canarias, y lo hemos hecho con la convicción y el deseo de que se produzca la necesaria reactivación económica de la isla, que depende, y mucho, del turismo. Vuelo muy agradable a bordo de un avión de Binter Canarias, que colabora con El Hierro en una campaña de promoción denominada “Tu cariño vuela”, acompañados de algunos medios de comunicación extranjeros.

En el siguiente enlace los lectores podrán acceder al artículo completo.

La isla de El Hierro, a vista de satélite de la NASA

Rompiente del mar en los farallones de Las Puntas

El Roque de Bonanza, caprichosa forma de la naturaleza volcánica

Impresionante acantilado visto desde el mirador de Las Playas

El valle de El Golfo, visto desde el mirador de Jinama

El Parador de Turismo, visto desde el mirador de Las Playas

El puerto de La Restinga tiene carácter pesquero y deportivo

Vista aérea del barrio pesquero de La Restinga

Fotos: NASA, Juan Carlos Díaz Lorenzo, INVOLCAN